Comenzamos una serie de textos en los que respiramos hondo y nos introducimos en el terrible mundo de los padres que no saben lo que sus hijos hacen con su tablet. Vamos a centrarnos primero en uno de los servicios más utilizados y cuyo alcance ha superado holgadamente, por desgracia, al de la mera lectura de textos a través de Internet. ¿Qué es un youtuber? ¿Quién es ElRubius? ¿Cómo puedo controlar los vídeos que ven mis hijos?

YouTube para torpes

YouTube es el servicio de almacenamiento de vídeos propiedad de Google. Con 10 años a sus espaldas, actualmente es la tercera página web más visitada del mundo solo por debajo del propio buscador y Facebook. Lo que ofrece es bastante simple: un servicio para subir nuestros vídeos y visualizar los publicados por otros usuarios. Las estadísticas a nivel mundial dan vértigo: Cada minuto son subidos 300 minutos de vídeo, y actualmente el más visto es el mismísimo Gangnam Style con más de 2500 millones de reproducciones.

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En YouTube tiene cabida de todo, desde trailers de películas hasta videos musicales, pasando por vídeos caseros de accidentes o gatos parlanchines, pero donde trunfa la plataforma es en el auge del fenómeno youtuber, considerándose como tales a aquellas personas que comparten experiencias, historias y conocimientos con los demás, en la mayoría de casos hablando directamente a la cámara y utilizando su propia imagen como baza para alcanzar el reconocimiento.

El éxito de los youtubers está íntimamente relacionado con los videojuegos, siendo el tema principal de los vídeos publicados por los más famosos. Es MUY probable que tus hijos sigan a ElRubius, quien se encuentra entre las quince cuentas de YouTube con más suscriptores del mundo con más de 13 millones (*Nota* Además de ver vídeos libremente, un usuario puede «suscribirse» a un canal en cuestión de alguien que suba vídeos para poder estar al día de sus novedades). El grueso de los llamados YouTubers es el de narrar sus experiencias mientras juegan en directo a videojuegos, que podríamos denominar como hacer un gameplay, pero la base es extensible a cualquier otro ámbito y existen canales muy famosos sobre maquillaje, ciencia o cualquier otra cosa que s enos ocurra.

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Cómo hacer que nuestros hijos no vean contenido para adultos

YouTube sigue unas rígidas (y a veces cuestionables) normas de decoro a la hora de permitir subir contenidos para adultos, ya sea por excesiva violencia, material de índole sexual o cualquier otra denuncia externa, incluso relacionada con los derechos de autor. Aún así, cuando alguien sube un vídeo, este puede marcarse como apto solo para adultos. En este caso, el usuario que intenta acceder al mismo debe tener la edad correspondiente para su visionado y estar navegando obligatoriamente a través de su cuenta de Google.

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Vamos a meternos en harina: YouTube puede visitarse de varias formas, siendo las principales el acceso a través de su página web (http://www.youtube.com) o descargando su app oficial. En ambos casos podremos habilitar el llamado «modo restringido», una opción que ocultará aquellos vídeos con contenido para adultos. En el caso de Android tendremos que irnos al menú de ajustes dentro de la aplicación pinchando en el botón desplegable (los tres puntitos) de la parte superior derecha de la pantalla. Dentro, tendremos que acceder al apartado General y marcar el interruptor junto a la opción Modo Restringido. En el caso de la versión de navegador haremos scroll hacia abajo en la pantalla hasta el final, donde veremos dicho botón junto a las opciones de idioma.

¿Puede resultar YouTube perjudicial para nuestros hijos?

Respuesta rápida: EN ABSOLUTO. Respuesta larga: como cualquier aspecto relacionado con la educación de los menores, la clave del éxito radica en saber encauzar al niño a través de contenidos que le resulten interesantes y provechosos. Es más, limitar una cantidad de tiempo diario a su uso es una completa tontería si durante esos minutos está aprendiendo. Existen canales didácticos en YouTube de todo tipo, muchos de ellos enfocados explícitamente al público infantil. La clave está en buscar canales interesantes y conseguir un lote de suscripciones interesante que se salga un poco del círculo de los youtubers jugando a juegos, videoclips lascivos y recopilaciones de vídeos de gente cayéndose.