Siete consejos para dominar el modo Touchdown de Clash Royale

Octubre está siendo uno de los meses más importantes de la historia de Clash Royale ya que ha sido cuando han lanzado la mayor cantidad de novedades de su vida junto a la actualización de las Misiones Épicas. Esta nueva versión de Clash Royale cuenta con un nuevo modo de juego que está apasionando a los fans desde que se lanzaron las primeras imágenes y que ahora ya tenemos disponible: el modo Touchdown cambia la experiencia de juego del título de Supercell y, tras jugar bastante, hemos creído conveniente ofrecer unos cuantos consejos para dominar el modo Touchdown de Clash Royale.

Confecciona un mazo equilibrado para este modo

Comencemos por lo más obvio: al tratarse de un desafío por elección de cartas, en cada partida tendremos que elaborar nuestro mazo a través de un draft. De ahí que sea fundamental elegir las cartas idóneas para este modo de juego, algo que puede ser totalmente distinto a las que suelen ser top en las batallas convencionales. Aunque parezca de lo más tópico decirlo, es imprescindible que no hagamos un mazo repleto de unidades de coste alto, que tengamos edificios o torrres disponibles, que intentemos tener hechizos a mano… Son afirmaciones de lo más típicas, pero que hay que tener siempre en mente cuando nos metemos en Touchdown.

El poder del Montapuercos

Cuando os hablamos del nuevo modo Touchdown, comentamos que el Montapuercos no iba a estar disponible debido a sus características. Parece que desde Supercell han claudicado y lo han introducido en la versión actual del modo de juego. Una decisión que no sabemos del todo si es positiva o no, ya que probablemente sea la carta más decisiva de todo el modo de juego. Está claro que siempre podemos bloquearla con edificios o con unidades, pero es imparable en los contrataques. Siempre que tengas la posibilidad de elegirla, hazlo sin dudas.

No te quedes sin edificios en mano

Al no contar torres o castillo que defienda nuestra zona, el hecho de poder contar con edificios es fundamental para sobrevivir a unidades que no hacen objetivo a otras unidades. Es cierto que podemos rodear estas unidades de mil y una criaturas que invoquemos, pero no siempre va a ser el método más efectivo. Por eso nunca está de más guardarnos una torre en la manga para sacarla cuando alguna de estas unidades esté cerca de nuestra línea y así hacer que se tenga que desplazar, obteniendo tiempo para hacernos con la victoria o para intentar salvar la casa.

Ojo a las unidades que se dividen

Cartas como el Golem, el Sabueso de Lava o, en menor medida, el Ariete pueden ser clave en cada partida del juego. Su larga resistencia ya es motivo de sobra para alegrarnos o asustarnos, dependiendo de en qué mano esté, pero una de sus mejores bazas en este modo de juego es su capacidad para transformarse en varias unidades una vez sean destruidas por primera vez. Esto las hace peligrosísimas cuando estén cerca de la línea de victoria puesto que, si «explotan» ahí, es más que probable que una de las nuevas unidades que emergen de ella salga directamente en el otro lado de la línea.

Los hechizos cuentan más que nunca

Los hechizos siempre han sido cartas que pueden darnos la partida si las usamos en momentos clave, pero en el modo Touchdown esto se multiplica por mil, puesto que lanzar un hechizo a tiempo suele ser motivo para obtener puntos. Vamos a disfrutar, y a sufrir, con el habitual lanzamiento de hechizos cuando haya unidades que se acerquen peligrosamente a la línea de victoria. Especialmente dañinos son el hechizo de Hielo o el Rayo, puesto que pueden fulminar criaturas o edificios que vayan a ser lanzadas en un preciso momento o que estén impidiéndonos el paso. De ahí que un preciso timing a la hora de lanzarlos es totalmente decisivo para alzarnos con la victoria.

La importancia de las unidades que cargan

Las unidades de gran velocidad tienen un gran poder en el modo Touchdown, algo que puede equipararse fácilmente a la figura del Running back en el Fútbol Americano. De ahí que los Bárbaros de Élite o el Leñador tengan un rol importante en el juego, pero aún más pueden tenerlo las unidades que efectúan carga, como los dos Príncipes o el Ariete, puesto que su velocidad punta es la más alta y pueden funcionar muy bien de dos formas distintas: ya sea como atacante en solitario para llegar a la línea de meta o como impulsor de unidades de gran resistencia que se encuentren delante suya. La de veces que he ganado con un Príncipe o un Ariete empujando a un Gólem de Hielo no son ni normales. Sin duda una de mis estrategias favoritas.

El juego en equipo es fundamental

Ya que hemos empezado con un tópico, que mejor que hacerlo con otro. Aunque suene un poco a consejos de Capitán Obvio, el juego en equipo es necesario para alzarse con la victoria. Pero totalmente. Desde el principio de cada partida, la compenetración entre los dos jugadores que forman equipo es importantísima para alzarse con la victoria. Por eso siempre es bueno esperar a que la otra persona elija cartas, para seleccionar en base a ello, o hacer lo contrario y elegir nosotros primero. Y luego ya están las mil y una estrategias de batalla que darían para otro artículo: no usar unidades de alto coste desde el principio, que uno de los dos siempre tenga un edificio a mano, ocupar una buena parte del terreno entre ambos, hacer que alguno siempre tenga elixir disponible en situaciones de emergencia… Podríamos seguir ad infinitum, pero lo mejor es que le echéis un vistazo a nuestra guía sobre cómo comunicarnos en Clash Royale.

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