Por fin tenemos con nosotros a la nueva versión de Ubuntu, que nos acompañará seis meses hasta la próxima versión LTS. Esto es un dato significativo, ya que todo lo que hemos visto en Ubuntu 10.10 y 11.04 más lo que veamos en 11.10 será en conjunto un indicador de lo que Canonical quiere que sea Ubuntu 12.04.
Pero no nos desviamos más, vamos a quedarnos con el flamante Oneiric Ocelot, que viene cargado de novedades, no tan visuales como las de la anterior versión, pero sí que incluso más importantes a nivel de rendimiento.
De entrada, veremos como Gnome 3 se encarga de mostrarnos la interfaz de Ubuntu. El cambio es notable en el aspecto de algunos programas como Nautilus, aunque los diseñadores han hecho lo posible por integrar al máximo los temas Light (Ambiance y Radiance). En cuanto a rendimiento, parece que Gnome 3 sigue conservando e incluso mejorando las estupendas propiedades de su versión anterior.
La consolidación de Unity sigue siendo un objetivo importante de cada a la aparición de Ubuntu 12.04. En esta versión encontraremos un Dash más completo, con Lentes integradas, nuevos efectos gráficos y muchas mejoras de configuración. Además, ya está lista para ser usada la versión 2D de Unity, creada para equipos con poca potencia gráfica.
Al iniciar Ubuntu 11.10 nos dará la bienvenida la nueva ventana de entrada o inicio de sesión, de cuyo aspecto y funcionamiento se encarga ahora LightDM en lugar del tradicional GDM. Esta página de inicio es ahora más simple y tiene un diseño bastante más atractivo que su predecesora.
Una de las aplicaciones que se echaban de menos en Ubuntu, si lo comparamos con otros sistemas operativos de escritorio, es una herramienta de copias de seguridad. Deja Dup se encarga ahora de ello, presentando una fórmula similar a la de Time Machine en Mac OS X o la herramienta incluida por defecto en Windows.
Respondiendo a las peticiones de los usuarios de Ubuntu, Thunderbird ha sido incluido como aplicación de correo por defecto, sustituyendo a Evolution. Los trabajadores de Canonical han tratado de integrar al máximo a Thunderbird con el escritorio Unity, con lo que no notaremos diferencia en este aspecto con su predecesor.
Aplicaciones más antiguas han ido dejando paso a las nuevas, como en el caso de Synaptic, que después de muchos años ya no viene incluido en entrada en Ubuntu, aunque puede seguir siendo instalada desde repositorios.
Luego tenemos las tradicionales actualizaciones de las aplicaciones de Ubuntu: Firefox, Gwibber o Ubuntu Software Center son las más significativas.
Ubuntu sigue evolucionando y, en su camino hacia el sistema operativo de escritorio total, nos sigue regalando versiones tan atractivas como este Ubuntu 11.10.
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