Llevamos ya dos entregas de versiones Alpha en Ubuntu 11.10 y poco a poco vamos viendo cambios relevantes en cuanto al funcionamiento y apariencia general del sistema.
Uno de los cambios que resultará más llamativo a primera vista es la adaptación de los temas Light (Ambiance y Radiance) a la nueva versión de las librerías GTK+. Este cambio afecta, a veces de manera llamativa, a las aplicaciones tradicionales de Ubuntu como Nautilus, aunque desde Canonical están trabajando para que el cambio tenga el mínimo impacto posible en el aspecto ya conseguido en versiones anteriores.
Aún así, los diseñadores de Ubuntu no cesan en su intento de mejorar el aspecto general de Ubuntu y ya están incluyendo «dark toolbars», esto es, barras de herramientas oscuras en las principales aplicaciones de Ubuntu.
Las aplicaciones nuevas empiezan a aparecer por Ubuntu y se acercan cada vez más a su integración completa. Thunderbird y Deja Dup ya vienen instaladas en Ubuntu Oneiric desde sus versiones más tempranas y se espera conseguir un nivel de integración óptimo.
Otro cambio llamativo es la supresión del MeMenu o indicador social de Ubuntu y su inclusión en el indicador de notificaciones, ahorrando así espacio en el panel de Unity y adaptándose más a las nuevas tendencias en cuanto a comunicación social.
Ésto ha hecho, a su vez, que el indicador de sesión crezca, ofreciendo opciones de configuración del sistema y acceso rápido a las principales funciones de administración.
El selector de ventanas ha sido modificado y adaptado al aspecto general de manejo de aplicaciones en Unity, un cambio también llamativo, sin duda.
Quedando tres meses para el lanzamiento final de Ubuntu 11.10, parece que Canonical se ha puesto las pilas y, desde el primer momento, están logrando dar el impulso necesario a Ubuntu para que vuelva a estar en boca de todos.