Nos guste o no, la pandemia ha instaurado las videollamadas como un método muy usado de comunicación tanto para el trabajo como en lo personal. Sin embargo, a día de hoy sigue siendo complicado hacernos con una webcam decente a buen precio, por lo que podemos optar por un plan B: convertir un teléfono que no usemos en una de ellas.

Apps para usar el teléfono como webcam

Para darle una segunda oportunidad a ese teléfono que tienes guardado en el cajón lo único que tienes que hacer es utilizar un software dedicado a esta tarea. Vamos a ver un par de ellos que no solo funcionan muy bien, sino que son gratuitos.

Droidcam

Si tienes un ordenador con Windows o Linux una de las mejores apps para estos menesteres es DroidCam. Para poder utilizarla necesitarás tener tanto la app para Android como el cliente de DroidCam para Windows.

droidcam Cómo convertir un móvil en una webcam para videollamadas

Esta app se puede utilizar mediante Wi-Fi y también con el cable USB con el modo de depuración USB. DroidCam es completamente gratuita, aunque en su versión de pago DroidCamX ofrece algunas mejoras como mejor calidad de video, herramientas de contraste y nitidez o controles de cámara.

Iriun Webcam

Otra aplicación muy popular en este campo es Iriun Webcam. Al igual que DroidCam, esta herramienta requiere la instalación de la app para Android y el respectivo cliente de Iriun Webcam para Windows (también compatible con macOS y Linux).

Iriun Webcam funcionando en el móvil y el PC

En general la calidad que ofrece es buena tanto en audio como en vídeo y para usarla solo tienes que tener el ordenador y el teléfono conectados a la misma red Wi-Fi. También funciona con una conexión por cable, aunque en este caso hay que tener en cuenta que dependiendo del teléfono y de la versión de Android que este tenga instalada, podrías tener que activar la depuración USB. Esto se puede activar desde las opciones de desarrollador.

Ventajas e inconvenientes de usar tu móvil como webcam

La principal ventaja de usar estas apps es evidente: no tendrás que desembolsar dinero en una webcam y podrás reutilizar un dispositivo que seguramente lleves tiempo sin encender.

Sin embargo, no esperes que la calidad sea la misma que la de una cámara dedicada específicamente a las videollamadas o las transmisiones en streaming. Ten en cuenta que es un gran esfuerzo para un teléfono enviar audio y video en tiempo real (no es su función de base) y además, recuerda que siempre va a ser imprescindible contar con una conexión Wi-Fi estable.

Por último, pero no menos importante, recuerda este tipo de aplicaciones necesita que se le concedan permisos para acceder a puntos sensibles de tu móvil como la cámara y el micrófono, por lo que siempre debemos asegurarnos de que proviene de un proveedor seguro.