Uno de los fallos más gordos a la hora de desarrollar software es el de olvidar la facilidad de uso en pos de otros aspectos estéticos o funcionales secundarios. Dukto es la enésima herramienta para enviar archivos de todo tipo dentre dispositivos, ya sean smartphones o equipos de sobremesa. Lo que la hace especial es la enorme facilidad y simpleza de la herramienta para realizar la tarea primordial que buscamos: enviar un archivo del punto A al B. El barroquismo dejémoslo para las catedrales.
El único requisito para usar la herramienta es, aparte de tener instalado el correspondiente cliente oficial (está disponible para Android, iOS, Windows, OS X y Linux) y tener los dispositivos «interesados» conectados a la misma red local. Dukto además es libre y de código abierto, por lo que es totalmente gratuito y no incluye publicidad de ningún tipo.
Su funcionamiento es tan simple como acceder al cliente y seleccionar una de las opciones de envío de archivos, que por defecto se dividen en texto plano, fotografías de nuestra galería o «archivos», no existiendo limitación alguna en esto último de extensión o formato. Tras esto, seleccionamos la máquina destino, ya sea identificándose de forma automática por la aplicación o introduciendo la dirección IP nosotros mismos. En cuanto sea recibida por la otra parte aparecerá una notificación para abrir directamente la recepción. Este es su cometido y lo realiza a la perfección. Ni más ni menos.
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