HERE Maps nació como un vano pero loable intento de competir con Google Maps en el ámbito de las aplicaciones móviles de mapas y geolocalización. Recientemente ha decidido ofrecer un contenido distintivo orientando su interfaz en una necesidad fundamental: explicarnos cómo llegar a un lugar y cuál es la mejor forma de hacerlo. En el proceso se ha reconstruido totalmente la aplicación hasta el punto de cambiar su imagen de marca para pasar a llamarse HERE WeGo, toda una declaración de intenciones.
Al acceder a la aplicación tendremos como antes el elegante sistema de visualización de edificios 3D con geometrías minimalistas, pero en cuanto navegamos por las opciones veremos que todo está orientado a llegar al lugar en cuestión y ofrecer información lo más detallada posible. Si introducimos una dirección de destino nos aparecerán todas las opciones para hacerlo, ya sea caminando, con nuestro propio vehículo o recurriendo al transporte urbano. Ahí sorprende al calcularnos las paradas más cercanas, las líneas que podemos coger y el tiempo de espera. Evidentemente todos estos servicios dependen de la disponibilidad de la información en nuestra ciudad, pero en el caso del que suscribe los resultados han sido bastante buenos.
Más allá de esto, HERE WeGo puede ejercer directamente de GPS para el coche, ofreciendo un modo de navegación que nos va dando indicaciones a medida que avanzamos por la ruta sugerida. Todo está pensado para resultar lo más práctico posible en situaciones en las que necesitamos orientarnos en terreno desconocido. De ahí que se incluya la inevitable opción de descargar localmente los mapas de la zona que nos interesa o habilitar un modo de ahorro de datos que utilice lo máximo posible dicha información local para ahorrar en nuestra tarifa de datos.
Por si todo esto fuera poco, y aunque es complicado competir en ese aspecto contra el gigante de Google, podemos utilizar todas las funciones de HERE WeGo a partir de la información extendida de los puntos de interés de la zona, mostrando tanto monumentos como locales de hostelería, pasando por hoteles, puntos de información o cajeros de banco. Llegados a este punto volvemos a tener la duda de si merece la pena utilizar un servicio así teniendo Maps al alcance, y la respuesta, como siempre, está en las necesidades de cada uno.