Office 365 es la versión online de la conocida suite ofimática de Microsoft, lanzada el pasado 2011 y en la que podíamos acceder a la mayoría de herramientas incluidas en el paquete desde el navegador. Hasta ahora era necesario disponer de una suscripción de pago para usarla junto a su aplicación oficial, pero ahora la app oficial para iOS y Android se puede utilizar de forma completamente gratuita, pudiendo visualizar, editar y crear documentos de Word, Excel y Powerpoint desde nuestro smartphone o tablet.
Una vez instalada la aplicación, tendremos que acceder a través de una de nuestras cuentas de correo, preferiblemente asociada a un dominio de Microsoft (Hotmail, Outlook, etc), ya que así podremos asociar al programa nuestra cuenta de OneDrive entre otros servicios.
La aplicación se divide en tres secciones principales. El Inicio nos mostrará los últimos archivos que hemos abierto, además de enseñarnos unos documentos de muestra para comprobar cómo se visualizan los documentos desde el programa. En el apartado ‘Abrir’ tendremos la posibilidad de asociar nuestra cuenta en la nube de OneDrive para acceder a los archivos que tengamos allí hospedados.
Por último, otro apartado nos permitirá crear documentos nuevos de Word y Excel además de empezar a trabajar a partir de algunas plantillas predefinidas. Powerpoint se queda fuera de la ecuación, permitiendo solo visualizar presentaciones. Para editar documentos que estén albergados localmente en nuestro dispositivo o en otros servicios remotos, tendremos que abrirlos utilizando el explorador de archivos que usemos normalmente eligiendo Office Mobile como asociado.
Hay que tener en cuenta que no se trata de una suite completa. Aunque es autosuficiente y permite crear y editar nuevos documentos, sus posibilidades son limitadas, teniendo tan solo acceso a los modificadores de formato básicos como negrita, subrayado y algunos colores especiales. Tan solo la versión para iPad dispone de opciones avanzadas de edición.
Por lo demás, se trata de una herramienta indispensable si trabajamos asiduamente con este tipo de documentos. Aunque no alcanza el nivel de QuickOffice, dispone de todas las herramientas básicas para convertirlo en nuestro editor y visualizador de archivos principal. A fin de cuentas, el software creado por la propia Microsoft es el más compatible y fiable para trabajar con archivos de su propio formato.
De momento las críticas son bastante malas.
Ni regalado lo quiero.