Una auténtica proeza gráfica: no se nos ocurre una manera más directa y sincera de describir el espectáculo visual que ofrece Space Commander: War and Trade. Esta creación de Home Net Games arranca a lo grande, en pleno combate espacial, pero encierra mucho más de lo que aparenta a primera vista.
Más allá de su impresionante factura técnica, lo que tenemos entre las manos es una ambiciosa producción diseñada para satisfacer a distintos tipos de jugadores, desde los amantes de la acción directa a los fans de las aventuras.
Comerciante, héroe o villano
En Space Commander: War and Trade podrás convertirte en héroe o villano, o simplemente dedicarte al transporte espacial de mercancías. Podrás formar parte de DeltaMerc y luchar para mantener la justicia en la Galaxia, convertirte en un pirata espacial y engrosar las filas del temible Sindicato o labrarte fortuna dentro de la compañía Motus y enfocar tus esfuerzos al comercio, construyendo y administrando tu propia flota de cargueros espaciales.
Elige tu destino e irás desbloqueando nuevas misiones para cada uno de los caminos que hayas elegido mientras te sumerges en diversas campañas y desbloqueas nuevas naves, que podrás personalizar y mejorar a tu antojo.
Distintas opciones para jugar en Space Commander: War and Trade
El abanico de posibilidades de diversión que ofrece Space Commander: War and Trade es tan amplio como la inmensidad del Espacio. Desde el menú principal podrás seleccionar la Campaña principal, pero también encontrarás la Conquista de Tau Ceti, el Desafío de los Capitanes, la opción de crear tu propia Campaña a través del Editor que incluye el juego, o probar fortuna en las Campañas creadas por la comunidad del juego.
Podrás pilotar tu nave a través de los acelerómetros de tu dispositivo móvil, pero también es posible activar la típica cruceta virtual desde el menú de opciones, algo bastante recomendable debido a las acrobáticas maniobras que tendrás que hacer para destruir a tus enemigos y esquivar sus disparos.
Aprender a maniobrar en ángulos cerrados
A través de la pantalla táctil, en pleno combate, se puede elegir hacia dónde re-direccionar la energía de la nave, ya sea a las armas, al escudo o a los motores, algo bastante útil cuando toca enfrentarse en solitario a varias naves enemigas a la vez.
Los escudos no son infinitos, así que más te vale aprender rápido a maniobrar en ángulos vertiginosamente cerrados si no quieres acabar convertido en chatarra espacial.
Profundo, espectacular y tremendamente desafiante, Space Commander: War and Trade se libera de las habituales ataduras de los juegos para dispositivos móviles para ofrecer una experiencia de dimensiones cósmicas.
Las primeras partidas son un poco desesperantes hasta que le pillas el truco al control de la nave, pero nadie dijo que conquistar el Espacio fuera una tarea sencilla. Tu paciencia tendrá su recompensa.
