Los grandes perjudicados de este movimiento no son otros que los desarrolladores, quienes se han visto obligados a tener una versión de 64 bits de sus apps, algo que en muchos casos no es tarea fácil. Por mucho que Google ofrezca soporte y guías para facilitar el migración del código entre versiones, no deja de ser un proceso tedioso y por supuesto, costoso.
A pesar de todo esto, nos guste o no, Google ya ha dado el golpe sobre la mesa y no será la primera ni la última. Arm también ha anunciado que sus CPU para teléfonos móviles ya no admitirán operaciones de 32 bits a partir de 2023, un movimiento que podría ser el estoque para los 32 bits en Android.
Primero fue Apple
El objetivo principal de acabar con las apps de 32 bits no es otro que el de poder exprimir al máximo los procesadores de los dispositivos, pero también el de unificar el ecosistema haciendo todo más armónico y simplificado. Y si hay una empresa que sabe de esto es Apple, quien fue pionera en esto de desterrar a los 32 bits.
El iPhone 5S fue el primer teléfono de Apple que tenía un procesador de 64 bits, y desde su lanzamiento en 2013 la empresa tenía el ojo puesto en crear un ecosistema para su App Store exclusivamente lleno de aplicaciones de 64 bits.
En el año 2015, Apple comenzó a establecer cada vez más requisitos tanto para las nuevas aplicaciones como para las actualizaciones que precisaban soporte para 64 bits. En 2017 directamente comenzó a notificar a los desarrolladores de la obligatoriedad de tener versiones de 64 bits o sus apps se esfumarían de la App Store y en 2017, unas horas antes de que diera comienzo la WWDC 2017, Apple comenzó con la debacle de los 32 bits. Los desarrolladores vieron como sus apps desaparecían, la mayoría de ellos alertados por los reportes de diferentes medios y sitios como TouchArcade.
¿Realmente qué diferencia hay entre 32 y 64 bits?
Existen diferentes arquitecturas, pero a nivel de usuario doméstico las más habituales son las de 32 bits y la de 64 bits. Los sistemas de 32 bits almacenan sus datos en piezas de 32 bits y los de 64 en piezas de 64.
Un bit es un valor binario que puede ser cero o uno. Una CPU de 32 bits puede almacenar 4.294.967.296 valores diferentes mientras que una de 64 bits es capaz de almacenar 18.446.744,073.709.551.616 valores diferentes. Dicho esto, la diferencia entre estos procesadores es —a grandes rasgos y sin entrar en detalles técnicos— que un procesador de 64 bits puede hacer más en menos tiempo y por ende, ofrecernos un mejor rendimiento.
Lógicamente, las aplicaciones de 32 bits estarán mucho mejor optimizadas para procesadores de 32 bits y viceversa.
Casi todos los teléfonos móviles lanzados en los últimos años cuentan con procesadores de 64 bits, pero en el caso de que tengas dudas, vamos a ver cómo puedes saber qué tipo de procesador tiene tu teléfono.
¿Cómo saber si mi móvil es 32 o 64 bits?
Como decíamos unas líneas más arriba, desde hace al menos seis años no se fabrican teléfonos de 32 bits, pero si no sabes de cuándo es el tuyo, puedes recurrir a una herramienta de ‘benchmarking’ para Android con la que podrás conocer a fondo los detalles de su CPU.
Nuestra recomendación en este caso es que utilices CPU-Z o AnTuTu Benchmark, pues con ambas herramientas puedes medir diferentes parámetros de tu teléfono e incluso compararlo con otros modelos.
En el caso de Antutu solo tienes que acceder al menú de Configuración y dentro del apartado «Sistema» y seleccionar «CPU». Aquí podrás saber si el procesador de tu teléfono tiene un núcleo de 32 o 64 bits.
En el caso de CPU-Z, una vez que hayas realizado el análisis del procesador solo tienes que buscar dentro del campo de arquitectura Kernel el tipo de tu CPU.
¿Es el fin de las aplicaciones de 32 bits?
Como hemos visto el interés de las grandes tecnológicas como Microsoft, Google o Apple es la de centralizar todo su ecosistema en torno a los 64 bits, pero esto no significa que estas estén condenadas a desaparecer. Recordemos además que cuando hablamos de apps de 32 bits no estamos solo refiriéndonos a las más antiguas, sino también a cualquiera publicada antes del 1 de agosto de 2019 en Google Play y que no incluyese compatibilidad con 64 bits.
Huelga decir que, aunque Google haya eliminado esas aplicaciones de su tienda, estas siguen siendo compatibles con todo tipo de dispositivos. Es más, aunque Android limite en algún momento su ejecución, podrían seguir vivas gracias emulación y la virtualización.
En Uptodown seguimos (y seguiremos) ofreciendo todas las versiones de 32 bits de las aplicaciones sin importar el hardware desde el que se realice la descarga, por lo que seguirán estando disponibles en nuestra plataforma de formas indefinida.
Si eres un desarrollador y tu app ha sido eliminada de Google Play, te ofrecemos la posibilidad de que la publiques en el repositorio través de nuestra plataforma para desarrolladores.