BlueStacks: la mejor forma de usar apps de Android en tu PC

En 2011 se lanzó la primera beta pública de BlueStacks, un software capaz de hacer correr aplicaciones de Android en sistemas operativos de escritorio tanto Windows como Mac. No se trata de un emulador completo, orientando su interfaz a la ejecución de apps móviles y la usabilidad a través de sistemas de control no táctiles. Tras varios años de cambios y mejoras, a día de hoy se puede considerar la mejor forma de emular Android en nuestro PC y tener una experiencia de uso a la altura de la plataforma original.

Instalación y configuración

El proceso de instalación no requiere de ningún engorroso proceso de configuración. La pantalla principal del menú no es más que un enorme listado con algunas de las aplicaciones soportadas organizadas por categorías. Si queremos instalar una de ellas, simplemente tendremos que hacer doble clic sobre la misma tanto desde el menú principal como de su propio buscador. A día de hoy, BlueStacks soporta más de 400.000 apps, por lo que será posible jugar sin ningún tipo de problema a juegos hasta ahora exclusivos de plataformas móviles como Clash of Clans, la saga de conducción Asphalt o la mascota virtual Pou.

Cuando intentemos instalar una de ellas, se nos recomendará asociar el programa a nuestra cuenta real de Android en caso de tenerla para así tener acceso a Google Play y descargar la app desde la tienda oficial, lo que no quita que podamos instalar cualquier archivo APK desde cualquier otra fuente (¿alguien ha dicho Uptodown?). Lo verdaderamente interesante es su facilidad de uso, asociándose el tipo de archivo a nuestro sistema operativo, ya sea Windows o Mac, de forma que al ejecutar el archivo desde el explorador de archivos, automáticamente lo instalará a través de BlueStacks.

Juegos táctiles con teclado y ratón

El mayor problema de este tipo de software es su capacidad para trasladar el control táctil en dispositivos con distinto sistema de control. Si ya de por sí existe una versión de Bluestacks para Windows 8 con la que utilizar el control táctil, la experiencia con teclado y ratón está perfectamente resuelta en muchos casos, apareciéndonos un cuadro informativo con las equivalencias de control. Si por ejemplo ejecutamos Temple Run, las flechas de dirección del teclado se corresponderán con los gestos táctiles, y otras dos teclas harán del giro o ‘tilt’ del aparato para controlar al personaje.

Yendo más allá, y no ocultando que se trata de una herramienta principalmente centrada en su uso con videojuegos, BlueStacks también soporta la conexión de gamepads de control vía USB: dependiendo de la aplicación controlaremos simplemente un cursor virtual simulando una pantalla táctil y en otros se realizará un mapeo automático del control del mismo modo que si conectáramos el mando directamente a un terminal Android.

Asociación con nuestro dispositivo

Si pinchamos en el reloj de la parte inferior derecha y accedemos al menú de ajustes podremos configurar muchos parámetros de BlueStacks como el idioma, el sistema de copia de seguridad, la activación de servicios de geolocalización o la posibilidad de sincronizar cuentas de usuario para recibir notificaciones de las mismas, ya un E-Mail o una red social en la que estamos registrados.

Pero lo mejor de todo está en la posibilidad de comunicar nuestro dispositivo Android ‘real’ con el programa a través de la app oficial BlueStacks Cloud Connect, de forma que podremos extraer las aplicaciones que tengamos instaladas en aquel y traspasarlas a la herramienta de escritorio, pudiendo sincronizar el estado de las mismas en la nube y recuperarlas cuando las necesitemos.