Cómo recuperar fotos borradas por error de tu smartphone

Uno de los momentos más dramáticos en la vida de cualquier usuario llega cuando pierde su archivos personales por error o accidente. Aunque estas desgracias siempre han estado asociadas a equipos de sobremesa, los smartphones y sus posibilidades de almacenamiento masivo son cada vez más susceptibles de pasar por lo mismo. Pero no hay que desfallecer, pues aunque en muchos casos es tarea imposible, existen métodos para recuperar fotografías y vídeos que hayamos perdido en nuestro teléfono.

¿En qué consiste la recuperación de archivos?

No es cuestión de magia. Cuando eliminamos un archivo de un sistema de almacenamiento no estamos realmente borrando dicho contenido, sino que marcamos la zona del disco en la que se encontraba como vacía para que el sistema pueda escribir encima (al menos en determinados sistemas re archivos como FAT32)

Por tanto, si no se sobreescribe información en esos sectores, existen posibilidades de volver a marcar dicha información como disponible. O lo que es lo mismo, si perdemos información, no hay que realizar ninguna tarea de escritura en la unidad donde se encuentre esta y realizar las tareas de recuperación lo antes posible. Dicho procedimiento variará dependiendo del sistema de almacenamiento del teléfono y si somos usuario root (o jailbreak en caso de iOS) en nuestro terminal.

Caso 1 – Los archivos están en una tarjeta MicroSD

En caso de que almacenemos nuestros vídeos y fotos en una tarjeta SD estamos de enhorabuena, ya que hay muchas más esperanzas de recuperación al poder trabajar de forma externa al teléfono y aislar la unidad afectada. Lo primero que debemos hacer en cuanto hayamos perdido las imágenes es desconectar la tarjeta y conectarla a un PC utilizando un lector de tarjetas. De esta forma, el sistema la reconocerá como una unidad de disco externa.

El programa estrella para Windows con el que recuperar archivos eliminados por error es Recuva, una herramienta desarrollada por Piriform, padres también del conocido CCleaner. En una entrada anterior ya hablamos largo y tendido sobre el programa, pero su funcionamiento no tiene ningún misterio: Abrimos el programa, elegimos la unidad en cuestión, el tipo de archivo que estamos buscando y tras un breve periodo de búsqueda nos aparecerá una lista con todos los archivos que han sido borrados recientemente. Si hay un círculo verde junto a él, es posible recuperarlo; si es rojo, lo habremos perdido para siempre.

Existen muchos otros programas que realizan tareas similares como Wise Data Recovery o alternativas más completas como Jihosoft Photo Recovery, pero en la mayoría de casos se trata de versiones de prueba que requieren comprar la aplicación para poder realizar la recuperación, ya que si no, lo único que hace es detectar los posibles archivos que puede restaurar.

Caso 2 – Los archivos están en la memoria interna

Los problemas vienen cuando nuestro smartphone no tiene un sistema de almacenamiento extraible y almacena toda la información en la memoria interna. Resulta mucho más complicado utilizar herramientas como Recuva en este caso, ya que al conectarlo al PC es detectado mediante el protocolo MTP en vez de un sistema de almacenamiento masivo, por lo que no puede tratarse como una unidad de disco estándar y la mayoría de programas de este tipo no son capaces de detectar el teléfono al usar un cable USB. Esto es debido a que la mayoría de almacenamientos internos en smartphones utilizan los sistemas de archivos EXT4 ó F2FS, en los cuales resulta casi imposible recuperar lo borrado.

Hacer root en nuestro dispositivo Android consiste en realizar cierta modificación a nivel de software para conseguir ciertos privilegios y funcionalidades que por defecto no son accesibles. Determinadas aplicaciones tienen este requisito para utilizarse, como es el caso de Hexabomb Recovery, una de las pocas apps capaces de recuperar archivos desde unidades EXT4.

Si no estamos por la labor de ‘rootear’ el teléfono, todavía podemos agotar nuestros últimos cartuchos utilizando ciertos programas de recuperación desde el PC. Dr. Fone es uno de ellos, cuyo asistente es capaz de recuperar fotografías, conversaciones de chat almacenadas y otros documentos temporales que no pueden ser localizados con facilidad.

Si todo lo anterior ha fallado y aún así queremos intentar alguna locura, podemos probar a crear una imagen exacta de nuestra unidad externa, virtualizarla en nuestro PC y restaurarla con Recuva o similares. En los foros de XNA-Developers hay un interesante tutorial sobre el proceso a seguir.

Experiencia personal

Efectivamente, todo este recorrido lo ha vivido el que suscribe tras haber borrado accidentalmente todas las fotografías de su terminal. Al tratarse de un Nexus 4, intenté recuperar los archivos de la memoria interna, pero por culpa de una mala gestión por mi parte acabé recuperando un porcentaje mínimo de las imágenes perdidas. Aquí van algunas recomendaciones adicionales para maximizar el resultado:

• Desactivar el WiFi y el 3G al momento junto con cualquier servicio de sincronización de archivos o realización de copias de seguridad para evitar la escritura en la unidad.
• No rootear el teléfono tras el accidente para utilizar apps de recuperación, ya que, aunque Android hermetiza los archivos del sistema, es más que posible que se realicen labores de escritura en el resto de la unidad.
• Si vamos a conectar el smartphone al PC, hay que utilizar un cable USB de calidad (preferiblemente el que incluye el dispositivo), y utilizar una conexión USB 2.0 o superior intentando evitar hubs y alargadores. Programas como Dr. Fone instalan sus propios drivers, y en el caso de Windows, ya sabemos lo poco agradecido que es a la hora de detectar hardware externo.
• Si utilizamos WhatsApp, en la carpeta /WhatsApp/Media del teléfono podemos encontrar un alijo de imágenes que pueden salvarnos la vida, ya ahí se almacenan todos los vídeos y fotos que enviamos a otros usuarios, por lo que si somos de los que comparten mucho material, posiblemente tengamos ahí gran parte de nuestra galería perdida.
• MÁS VALE PREVENIR QUE CURAR, así que es una buena idea utilizar algún respaldo en forma de servicio de almacenamiento de archivos en la nube con sincronización automática como Google Drive o DropBox.