Cómo limpiar nuestra cuenta de Facebook

Facebook ha vivido sus propios locos años locos de fiesta y swing en los últimos tiempos. Los ‘likes’ indiscriminados y publicaciones masivas han estado – y están – a la orden del día en nuestro muro, lo que se traduce en una enorme ventana de indiscreción para que cualquiera conozca a dedillo nuestras aficiones, gustos y preferencias. Si a esto le sumamos un número de amigos en la red social mucho mayor que el que querríamos y medio centenar de aplicaciones asociadas a nuestra cuenta que en muchos casos ni sabemos su funcionamiento, puede darse el caso de que nuestra cuenta pueda acarrearnos problemas más graves de lo que pensábamos.

Amigos vs Conocidos

¿De verdad tienes más de 300 amigos? El que suscribe no es precisamente una estrella mediática, y tiene como mucho unos 30 amigos en Mundo Real (TM) a los que se les puede considerar como tales. El resto son conocidos o gente que pasó por mi vida dejando mayor o menor huella. Por tanto, no se me ocurren muchos motivos para compartir públicamente todo lo que hago o dejo de hacer con gente de la que no sé nada, y más sabiendo los peligros que conlleva eso de ser un incauto exhibicionista digital.

Facebook permite limitar lo que nuestros contactos saben de nosotros de muchas formas. Una de las más prácticas es la de limitar el acceso a un determinado subgrupo de contactos catalogándolos con otra definición. Si accedemos al apartado Amigos de nuestro muro y pasamos el ratón sobre el botón del mismo nombre de un contacto en cuestión, veremos que existe una opción llamada Conocidos. Marcando a un contacto con esta denominación, sus publicaciones dejarán de estar visibles en nuestro muro en caso de que no nos interesen, aunque podemos ir mucho más allá.

Cualquiera de los apartados de nuestro muro puede limitarse para un grupo en concreto. Tenemos que acceder a Configuración > Privacidad, darle a Editar en la opción ¿Quién puede ver las publicaciones que hagas a partir de ahora? y pulsar en Amigos > Más opciones > Personalizado. Si en el apartado ‘No compartir esto con’ escribimos el grupo Conocidos habremos creado un redil para aquellos contactos que no queremos quitar pero sí evitar que nos vean.

Ya no me gusta

No sé lo que pensaréis de alguien que va por la calle con un cartel colgado del cuello que pone «Me gustan comer pipas saladas, las películas de Cantinflas y esnifar Cola-Cao». Poco más o menos eso es lo que hace cualquier usuario de Facebook con exceso de Likes en su cuenta. Evidentemente no vamos a sufrir una suplantación de identidad por algo así, pero no me sentiría cómodo sabiendo que todo el mundo conoce minuciosamente los sitios a donde voy, la música que escucho y la comida que me gusta.

Imaginemos que nos encantan Los Beatles y una de las contraseñas que utilizamos para registrarnos muchos sitios de Internet es yellowsubmarine. Si fuera un usuario malintencionado no tardaría en utilizar un poco de ingeniería social para intentar jugarle una mala pasada a alguien.

En la opción editar perfil podemos gestionar todos los módulos temáticos que aparecen en nuestro muro. Pulsando sobre el botón Administrar de cualquier grupo o ‘Me gusta’ podemos desligarlo de nuestra cuenta o hacerlo invisible para determinados contactos, algo especialmente útil si hacemos uso de la mencionada subcategoría de conocidos mencionada en el apartado anterior. Además, existen herramientas como Like Cleanser, un servicio web que revisa nuestra cuenta y nos muestra un listado con todos nuestros ‘Likes’ para así eliminarlos de una forma más intuitiva.

Aplicaciones asociadas

¡Pepito solicita que le envíes monedas de chocolate y estrellitas de colores para construir su castillo de la piruleta! ¡Es justo lo que necesitaba saber! Las publicaciones automatizadas a partir de aplicaciones asociadas a nuestra cuenta de Facebook son el mal en estado puro. Si bien usar nuestros credenciales sociales para registrarnos en servicios y utilizar determinados programas agiliza mucho las labores de registro, hay que tener en cuenta que parte de nuestra información es utilizada por terceros para promocionarse por la red. Seguro que sois familiares con esas invitaciones en las que se te avisa de que tu primo y tu cuñado juegan al Candy Crush Saga.

La forma de ver nuestras aplicaciones asociadas es en Configuración > Aplicaciones. Desde ahí podremos, o bien limitar las publicaciones de aplicaciones para que no sean visibles por otros usuarios o simplemente desligarlas por completo y eliminar cualquier rastro de interacción con ella. Puede que nos topemos con una sorpresa si nunca hemos accedido a este apartado. Cada juego o programa que hemos probado en Facebook aparecerá ahí, así que es bien momento para tirar lastre y hacer limpieza, máxime si en algunos casos ni siquiera recordamos que hemos utilizado dichas aplicaciones.