Cada generación tiene sus propia jerga y sistemas de comunicación que los hace únicos y diferentes con respecto a sus antecesores. La revolución tecnológica y temprana inmersión de la juventud en estos menesteres tiene mucho que ver en todo esto; ahí quedó el ya interiorizado ‘lenguaje SMS’, y a partir del uso masivo de servicios de mensajería instantánea, los llamados emojis son la nueva revolución del lenguaje digital, una evolución lógica y globalizada del emoticono ASCII de toda la vida. Los usamos a diario en nuestros smartphones, pero, ¿sabemos de dónde provienen o cómo han llegado a estandarizarse globalmente?
¿De dónde provienen?
Etimológicamente, la palabra emoticono es un neologismo formado por las palabras emoción e icono, quedando bastante claro su cometido con esta definición. Si bien su origen y actual concepción está ligada al uso en el ámbito tecnológico, es posible encontrar referencias mucho más antiguas a la era digital, como la descubierta en la revista satírica Puck, que en 1881 publicó una serie combinaciones de caracteres tipográficos para representar estados de ánimo.
Aún así, la primera referencia real que pretende estandarizar y regular el uso de los emoticonos en algún círculo de comunicación digital es la llevada a cabo por el reputado investigador Scott Fahlman, quien en 1982 envió un mensaje a sus compañeros a través de la BBS que utilizaban en la Carnegie Mellon University, donde aparecieron por primera vez los smileys verticales : -) y : -(.
Emoticono vs Emoji
Los japoneses siempre van a su ritmo, y de entre las muchas derivaciones que se produjeron en el código ASCII para representar emociones surgieron los llamados kaomoji creados a mediados de los 90, con la particularidad de representarse horizontalmente sin tener que girar la vista para ver el resultado. Algunos ejemplos aclaratorios: (づ。◕‿‿◕。)づ –╭( •̀•́ )╮- (✿◠‿◠) – ლ(❤ʚ❤ლ) – (ノಠ益ಠ)ノ Chulos, ¿verdad?
En principio, los emoticonos eran creados a partir de caracteres, pero a finales de los 90 se comenzaron a utilizar equivalencias gráficas en forma de pequeños iconos para representar todo tipo de elementos más allá de caras con estados de ánimo. NTT Docomo, el mayor proveedor de servicios móviles de japón, fue el primero en integrarlo en sus servicios, pero no fue hasta 2007 cuando dichos iconos fueron introducidos en el estándar Unicode para poder usarse en cualquier sistema capaz de trabajar con él. O lo que es lo mismo, los emojis, aunque los veamos como pequeñas imágenes, realmente son caracteres con su propia codificación y que son representados de distinta forma dependiendo del software donde se reproduzcan. De ahí que un mismo emoticono se vea diferente en un iPhone, un dispositivo Android o en la herramienta de mensajería de Google.
Los emojis más utilizados
El uso de la terminología acortada en los SMS y posteriormente el boom de las comunicaciones a través de nuestro smartphone ha provocado que cada vez requiramos más el uso de emoticonos para expresar sentimientos de forma inmediata hasta el punto de suplir directamente una expresión escrita por el dibujito en cuestión. La ‘cúpula’ de desarrolladoras enfocadas en el ámbito móvil son conscientes de esta necesidad, y por eso Apple y Android hicieron sus sistemas compatibles con el estándar incluso antes de que fueran integrados en Unicode.
Mattew Rothenberg creó hace tiempo un sistema para contar el número de veces que se usa cada emoji en Twitter, plasmando los resultados en un ranking dinámico en constante actualización donde podemos comprobar cuales son los más utilizados. Ver a través de esta web cómo se publican masivamente en tiempo real nos da una idea de la importancia que tiene este sistema de comunicación en la actualidad. (Aquí el ranking completo).
¿Cómo reacciona el cerebro al ver un emoticono?
Los emojis han alcanzado tal grado de integración en nuestra vida cotidiana que nuestro cerebro se ha adaptado a su uso hasta niveles que no somos capaces de asimilar. Psicólogos de la Flinders University en Australia han publicado un estudio en el que han medido la actividad cerebral de un grupo de estudiantes al ver emoticonos escritos por sus compañeros en mensajes que les envían y comparándola con la reacción al ver la cara real del interlocutor. El resultado es esclarecedor: el efecto en ambos casos es prácticamente el mismo, por lo que prácticamente, asociamos estos caracteres digitales a la expresión que pretenden transmitir.
250 nuevos emojis que llegarán este verano
Si bien ya existen más de 700 emojis con su propio código de identificación en Unicode, la lista está a punto de ampliarse con muchos otros con el lanzamiento de la nueva versión 7.0.0 del estándar, que estarán disponibles en las próximas semanas a medida que los servicios de Apple, Google o Microsoft integren el soporte en su software.
La lista suplirá con nuevas imágenes algunas de las existentes y añadirá muchos elementos nuevos. En esta lista de (atención) la Emojipedia se pueden consultar e incluso visualizar en algunos casos, aunque no estarán disponibles hasta el mes de julio.