Seguro que, como todo buen internauta, tienes una cuenta de usuario en más de un servicio web o aplicación, empezando por tu cuenta de usuario en tu sistema operativo. Una tendencia muy común es la de asignar a cada cuenta de usuario la misma contraseña y no tener distintas contraseñas para cada una de ellas.
¿Por qué es importante tener distintas contraseñas para distintas cuentas?
Tener varias contraseñas para nuestras cuentas de usuario es vital para la seguridad de las mismas. Un ejemplo claro y muy reciente lo tenemos en el reproductor de música por streaming Spotify. Para disfrutar de su impresionante catálogo musical tenemos que crear una cuenta de usuario (gratuita o premium). Pues bien, como indican en su blog, debido a un fallo de seguridad todas las contraseñas creadas antes del 19 de diciembre de 2008 están comprometidas y, por tanto, también lo están los datos almacenados en ella.
Si reducimos el caso a una vulnerabilidad en un servicio, el fallo puede no ser tan grave, pero si compartimos contraseña con otros servicios las consecuencias pueden ser desastrosas: desde perder tu cuenta de correo electrónico hasta poner en peligro tu cuenta bancaria en internet.
¿Cómo evitar ésto?
El método más sencillo y seguro es usar siempre contraseñas distintas para distintos servicios. De esta forma, si una cuenta de usuario se ve comprometida, el resto no se pondrá en peligro.
También es recomendable cambiar cada contraseña cada cierto tiempo (2-3 meses), de forma que tus contraseñas antiguas queden inutilizadas.
¿Y cómo acordarse de una contraseña distinta para cada cuenta de usuario?
Hoy día ésto no es problema. Tenemos cientos de aplicaciones disponibles para almacenar nuestras contraseñas de forma segura en nuestro sistema, de forma que sólo nosotros podamos acceder a ellas. En Uptodown podemos encontrar programas tanto para la generación de contraseñas aleatorias como para el almacenamiento de las mismas.
Eso sí, si quieres asegurarte de que tus contraseñas están a salvo no hay nada más efectivo que papel y lápiz.
[…] Tu cuenta de correo electrónico, de messenger, tu Facebook, tu cuenta bancaria en Internet… todas ellas tienen algo en común: custodian datos personales protegidas únicamente por una contraseña. Siendo esto así, conviene que todas ellas sean totalmente seguras y distintas para cada cuenta. […]